Una noche se cruzaron dos peculiares personajes: la campesina y el pingüino errante.
Pero como es muy Martes para las historias de amor, y en un rato me voy al campo, van a tener que esperar para el cuento completo.
Estoy hecho un vago.
=)
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El pingüino era grande, pero la campesina valiente...
ResponderEliminarChe panza, a ver si arreglamos el blog!
Saludos